La época veraniega, con las altas temperaturas y el aumento de riesgo de deshidratación, provoca un incremento en los casos de litiasis urinaria o cálculos en el riñón, como se conocen popularmente. Por ello, los médicos recomienden beber mucho líquido (entre 2,5 y 3 litros al día) y seguir una dieta variada baja en sal, en proteínas de origen animal e hidratos de carbono durante estos meses de calor.
El calor favorece la sudoración y, por lo tanto, la deshidratación, lo que aumenta la saturación de ciertas sales en orina que predisponen o aumentan el riesgo de padecer una litiasis urinaria. Diversos estudios demuestran un aumento de los episodios de cólicos renales atendidos en servicios de urgencias en la época estival. Aunque la formación de piedras tiene un origen diverso, la dieta y el estilo de vida son dos factores determinantes a tener en cuenta.
Se trata de una patología que en la actualidad afecta a más de dos millones de españoles. La relación entre dieta y litiasis es mucho más directa en pacientes con síndrome metabólico. Con el fin de facilitar su diagnóstico y ofrecer el tratamiento más adecuado, la AEU trabaja en la actualidad en un atlas de urolitiasis de fácil y rápida consulta, que estará disponible a partir de enero de 2017.
Usando imágenes de las diferentes clases de piedras, acompañadas de una breve explicación de las mismas, el atlas aportará información muy esquemática sobre los factores que inducen su formación, las características más relevantes y el tratamiento recomendado para cada caso.